
Upstream: cuáles son la operadoras que más invirtieron en 2024
Con un 76% de las inversiones concentradas en el shale, el sector petrolero argentino afianza su rumbo hacia Vaca Muerta. El gas cae, el offshore no despega y el convencional se retrae.
El desarrollo no convencional continúa consolidándose como el principal motor del sector hidrocarburífero argentino. Según un informe de la consultora Aleph Energy, dirigida por Daniel Dreizzen, de los U$S 12.830 millones de dólares invertidos en el segmento upstream en 2024, un 76% fue destinado a proyectos shale, con fuerte epicentro en Vaca Muerta.
La Cuenca Neuquina volvió a ser protagonista, concentrando el 78% del total nacional, lo que reafirma su rol como núcleo estratégico del mapa energético. Solo en esta cuenca se invirtieron U$S 9.954 millones, muy por encima del resto: la Cuenca del Golfo San Jorge recibió U$S 1.847 millones, y la Austral, U$S 637 millones.
El informe también detalla el ranking por empresa. YPF lideró el año con 4.789 millones de dólares invertidos, seguida por Pan American Energy (U$S 1.907 millones), Vista Energy (U$S 1.227 millones), Pluspetrol (U$S 978 millones) y TotalEnergies (U$S 700 millones). También figuran Tecpetrol (U$S 678 millones), CGC y Shell (ambas con U$S 406 millones).
El informe elaborado por Milagros Piaggio refleja una clara reorientación del sector hacia el petróleo: el 77% de las inversiones totales se destinaron al crudo y solo el 23% al gas natural. Esta diferencia se tradujo en una suba del 21% en la inversión petrolera, mientras que el gas sufrió una caída del 39% interanual, profundizando el cambio de foco productivo.
Neuquén lidera, el convencional retrocede
Por provincias, Neuquén encabeza cómodamente el ranking con U$S 9.700 millones de dólares, seguida por Chubut (U$S1.222 millones) y Santa Cruz (U$S794 millones).
En contraste, el segmento convencional evidenció una retracción del 22%. Entre las causas se destacan la salida de operadoras de áreas maduras y la estrategia de desinversión impulsada por YPF en el marco del Proyecto Andes, que transfirió activos convencionales para concentrarse en el no convencional.
Exploración y offshore: rezagados
Otro dato relevante es la escasa participación de la exploración, que solo representó el 4,5% del total invertido. En tanto, el offshore convencional explicó un 5,5%, sostenido en parte por la finalización del Proyecto Fénix en la Cuenca Marina Austral 1, prevista para fines de este año.
Sin embargo, el offshore continúa en una etapa de expectativa. Si bien no está paralizado, aún no muestra el despegue que muchos actores del sector esperan.
Proyecciones 2025: más shale, menos convencional
De cara a 2025, Aleph anticipa que la caída del convencional podría profundizarse. Algunas áreas clave, como Los Perales–Las Mesetas, Cañadón León–Meseta Espinosa y El Guadal–Loma del Cuy, aún no tienen estimaciones de inversión.
En este contexto, Vaca Muerta se perfila para continuar siendo el eje del desarrollo hidrocarburífero nacional, tanto en términos de producción como de atracción de inversiones.
Nota: Artículo publicado por Daniel Barneda en El Economista.
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