La demanda mundial de crudo en baja

El último relevamiento de la Agencia Internacional de Energía (AIE) puso el foco en la oferta y demanda de petróleo, los inventarios y la actividad de refinación.

El crecimiento de la demanda mundial de petróleo está perdiendo terreno, con ganancias anuales disminuyendo de 2,8 mb/d en el tercer trimestre de 2023, a 1,8 mb/d en el cuarto trimestre de ese mismo año. Una fuerte caída en China respaldó una disminución de 830 mb/d en la demanda mundial de petróleo a 102,1 mb/d en el último trimestre de 2023. Se prevé que el ritmo de expansión se desacelere aún más hasta 1,2 mb/d en 2024, en comparación con 2,3 mb/d del año pasado. China, India y Brasil seguirán dominando las ganancias.

El análisis que hizo la Agencia Internacional de Energía (AIE) aportó nuevos datos sobre el suministro mundial de petróleo, el cual registró en enero una fuerte caída de 1,4 mb/d m/d después de que una explosión en el Ártico interrumpiera la producción en América del Norte y cuando la OPEP+ profundizó los recortes de producción.

No obstante, el informe indicó que la producción récord de EE.UU., Brasil, Guyana y Canadá ayudará a impulsar el suministro fuera de la OPEP+ en 1,6 mb/d este año en comparación con los 2,4 mb/d en 2023, cuando el suministro mundial total de petróleo aumentó en 2 mb/d a un promedio de 102,1. millones/día.

Para la AIE se espera que el rendimiento de las refinerías se acelere desde un mínimo estacional de 81,5 mb/d en febrero. La actividad de la Cuenca Atlántica se recuperará de las interrupciones relacionadas con el clima en EE.UU que redujeron el funcionamiento en hasta 1,7 mb/d, a pesar de un repunte en el mantenimiento planificado y a medida que entre en funcionamiento nueva capacidad en los países no pertenecientes a la OCDE.

Para 2024 en su conjunto, se pronostica que el consumo de crudo de refinería aumentará en 1 mb/d a 83,3 mb/d, ya que una disminución de 330 mb/d en la OCDE mitiga las ganancias fuera de la OCDE. En tanto, en diciembre, las existencias mundiales aumentaron en 21,6 millones de barriles debido a un aumento en el petróleo en el agua más que compensó la caída de inventarios terrestres.

Nota: Artículo publicado por Daniel Barneda en Mejor Energia.